Un cierto nivel de curiosidad debe ser evolutivamente ventajoso. Sin duda, ayuda a hacer descubrimientos.
La investigación de Daniel Berlyne sobre la curiosidad podría ofrecer algunas pistas: [de Wikipedia] "Su trabajo se centró en 'por qué los organismos muestran curiosidad y exploran su entorno, por qué buscan conocimiento e información'.
En su opinión, los objetos influyen en tres niveles: psicofísico, ambiental y colativo. Este último era un término acuñado por Berlyne que intentaba describir los niveles hedónicos de fluctuación de la excitación a través de estímulos como la novedad, la complejidad, la sorpresa y la incongruencia. En última instancia, creía que la excitación era mejor y más eficaz cuando se situaba en un nivel moderado y estaba influida por la complejidad y la novedad del objeto excitante".
Cuando hago descubrimientos, me siento naturalmente estimulada cada vez que oigo algo nuevo o inusual, ¡y siento curiosidad por investigarlo!